sábado, 7 de enero de 2012

Es increíble todo lo que puedes ocultar con solo poner una sonrisa en tu rostro.


Alguien que tenga como mayor afición verte sonreír. Alguien que su color favorito sea o bien el de tu pelo, o el de tus ojos, o el de tu piel... Que el sonido que prefiera ante cualquier otro sonido de la tierra, ante cualquier melodía o ante cualquier instrumento sea el de tu risa o el de tu voz susurrando en su oreja. Alguien que este loco por ti, y haga miles de locuras con tal de demostrarlo. Alguien que te quiere hasta cuando te levantas malhumorada por las mañanas. Alguien que te haga algún regalo que otro, pero que sobretodo tenga miles de detalles de papel. Alguien que te llame princesay que te trate como si lo fueras.Y sé que ese "alguien" es él.




No tengo todo calculado, ni mi vida resuelta.. Solo tengo una sonrisa y espero una de vuelta!



Sonaba aquella canción, como si de una banda sonora para ese momento se tratara. 
- Y tú, ¿tienes miedo de que algo falle?
- No. Sólo le tengo miedo a una cosa.
- ¿A cuál?
- A perderte.

Todo acabó en un beso y un abrazo acompañados de un "Estoy seguro de que esto durará mucho". Hoy no suena aquella canción, simplemente suena ese diálogo una y otra vez en su interior. Lo recuerda pero no entiende nada, a pesar de que ya se había hecho la ligera idea de todo lo que pasaba, ya sabía muchas más razones. Había decidido plantearse nuevos objetivos, ya no quería hacer esfuerzos para lograr entender algo. Sólo quería pasar página, olvidar las mentiras y las falsas promesas. Todo parece más fácil pensando que no lo ha vuelto a ver y que tardará mucho en hacerlo, pero incluso lo más sencillo tiene su complejidad.