domingo, 27 de mayo de 2012

Todo era más fácil cuando mi única preocupación era colorear sin salirme de la raya


Tengo miedo de perderme, de no saber en que dirección caminar, de perder la luz y vagar por la oscuridad. Tengo miedo de dejar de ser yo, miedo de no reconocer mi reflejo, de perder el norte, el control. Tengo miedo de mirar a mi alrededor y no ver a nadie, de no tener un hombro en el que llorar, un amigo al que escuchar, una vela que soplar. Tengo miedo de la oscuridad, aunque mas miedo me da la claridad, ya que puedo ver venir los duros golpes que esta vida me da.
Bebo el whisky de tu lengua, y ahí nomas, con el alma copeteada te sostengo. Vaya a ser que en un segundo de ebriedad me secuestren los agentes del infierno. Me someto, así, a tu entrega. Me rescata, me enloquece y me sosiega.